El Blog de SFM

Las ceremonias funerarias son una manera de expresar sentimientos como el amor, admiración y cariño a los seres queridos que se han ido y una forma de despedirles. Esto, que llevamos haciendo desde tiempos ancestrales, ha ido cambiando con el paso del tiempo y se realiza de modo distinto en cada cultura.

En este artículo repasamos los ritos y ceremonias funerarias según cuatro religiones diferentes.

 

Celebración de un funeral según la religión católica

Para empezar, hablemos del concepto de la muerte para la religión católica. Ésta hace referencia a un viaje del alma al cielo, al infierno o al purgatorio, según las buenas acciones que el fallecido ha tenido en vida. Sin embargo, antes de la muerte puede llevarse a cabo la extremaunción, liberando así de los pecados a la persona, para que su alma pueda descansar en paz.

Cuando fallece alguien, sus familiares y allegados organizan un velatorio para acompañarle hasta el momento del sepelio. Tradicionalmente este acompañamiento solía realizarse en el propio domicilio donde vivía el finado, pero en la actualidad prácticamente la totalidad de las familias recurren al uso de tanatorios. Estas instalaciones están diseñadas y orientadas a facilitar un entorno adecuado para esta despedida, ofreciendo además una serie de servicios complementarios enfocados a hacer más llevadero este doloroso momento.

Antes de la inhumación o incineración de la persona fallecida se celebra una ceremonia religiosa. Esta ceremonia puede ser de carácter breve, como los responsos, o más extensa, como la misa. Además, puede celebrarse en el tanatorio donde se está realizando el velatorio o en el propio cementerio o crematorio donde se va a realizar la inhumación o incineración. También es frecuente la celebración de ceremonias religiosas conmemorativas posteriores, en la iglesia o comunidad en la que residía la persona fallecida.

Durante mucho tiempo, la incineración no fue una opción aceptada por la iglesia católica, pero actualmente sí lo es, aunque con algunas condiciones relativas al destino de las cenizas funerarias, ya que se establece que no deben conservarse en casa, dividirse o ser esparcidas fuera de camposanto.  

Según los últimos datos ofrecidos por la Asociación Nacional de Servicios Funerarios (Panasef), en 2019 un 44,54% de los fallecidos fue incinerado, lo que ha implicado más de 3 puntos de crecimiento respecto al año anterior.

Actualmente, algunas funerarias como Servicios Funerarios de Madrid, ofrecen la posibilidad de dotar a estas ceremonias de un alto grado de emotividad, realizando ceremonias de despedida totalmente configurables y personalizadas.

 

Celebración de una ceremonia funeraria según la religión judía

El concepto de muerte para el judaísmo es más ambiguo, ya que en sus escrituras sagradas hablan del Mundo Venidero. Un nuevo mundo que viene con un mesías a restablecer una vida sagrada y, según sus creencias, habrá una resurrección de los muertos cuando ese momento llegue. No ponen mucha atención a la muerte en sí misma sino a las acciones, oraciones y obligaciones que se tienen durante la vida para sanar al mundo. 

Esta religión indica que, al morir una persona, ésta debe colocarse en el  suelo junto a una vela encendida y taparse. A partir de ese momento, estará acompañado por el Shomerim, quien tiene la responsabilidad de velar al fallecido y no podrá ingerir ningún alimento en su presencia, como símbolo de respeto. 

Al llegar a la funeraria se lleva a cabo el Tahara, que es el baño del cuerpo para su purificación, tras el cual se viste con una mortaja de lino o algodón blanco. Existen sociedades santas llamadas jevrákadishá que se encargan de esta tarea, que se puede realizar en el propio tanatorio o en ocasiones en el cementerio, como es el caso del cementerio municipal hebreo de Madrid.

Las ceremonias funerarias judías son más sombrías y austeras, no cuentan con música ni flores y, además, cualquier espejo u objeto que brille, es cubierto para no deslumbrar. 

Tras la ceremonia religiosa, se da paso a la inhumación, que siempre que es posible se realizará de manera que el cuerpo esté en contacto con la tierra, aunque sea parcialmente.

Madrid cuenta con un Cementerio Municipal Hebreo  que, desde 1922, forma parte del complejo funerario del Cementerio Municipal de Nuestra Señora de la Almudena.

 

Celebración de una ceremonia funeraria según la religión musulmana 

Para la religión islámica la muerte es un acontecimiento natural y es el comienzo de un nuevo mundo que dará paso a la vida eterna.

Según esta creencia, al fallecer, el difunto debe ser inhumado con la mayor rapidez posible, a ser viable en las 48 horas siguientes a su muerte.

Habitualmente el cuerpo es bañado por sus familiares y envuelto  en una tela blanca para ser transportado al aire libre, junto al cual se realizarán las respectivas oraciones, guiadas por un Imán. Los tanatorios ponen a disposición de los solicitantes las instalaciones, para facilitar en la medida de lo posible las costumbres vinculadas a la despedida del fallecido. 

Tras la oración, es celebrado el Al-dafin, que es el entierro, realizado sin ataúd en los países en los que sus leyes así lo aceptan. Para tal acontecimiento, al que solo podrán asistir hombres, el cuerpo siempre debe estar orientado en dirección a la Meca.

En España actualmente hay 35 cementerios musulmanes, pero cabe destacar el cementerio musulmán de Griñon, por ser el más importante y uno de lo más grandes. En él puedes encontrar un retablo barroco de madera del conocido pintor renacentista Juan Correo de Vivar, una de sus primera obras en solitario que aún se conserva en el cementerio. 

 

Celebración de una ceremonia funeraria según la religión evangélica

Los funerales evangélicos constan de 3 ritos culturales: vigilia del fallecido, liturgia funeraria y el compromiso. Y cada uno de ellos es celebrado en un momento específico de la muerte.

• La vigilia hace referencia al velatorio del fallecido, momento en el que la familia puede celebrar la vida de éste con oraciones, cantos o palabras y recordar lo que fue y lo que es. Ya que los cristianos protestantes, al igual que los católicos, tienen un concepto de “vida después de la muerte” que lleva a vivir la celebración con mayor positivismo.

• La liturgia funeraria es celebrada en la misa de la iglesia parroquial, donde se llevan a cabo rituales teniendo como protagonista a Dios y las escrituras sagradas. 

• Por último, tenemos el compromiso que es el acto del entierro o sepultura de los restos del fallecido, donde esa persona puede descansar en un lugar sagrado. En los féretros y ceremonias evangelistas podemos encontrar detalles sagrados como la cruz, pero nunca imágenes de Cristo, la Virgen o algún santo. Lo importante de un funeral protestante es hacerlo personal con oraciones seleccionadas y poemas que le gustaban a la persona homenajeada.

Como has podido comprobar, cada religión tiene unas ceremonias funerarias muy particulares…

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